La estación cuenta ahora tres nuevos ascensores, uno de la calle al vestíbulo y los otros dos del vestíbulo a los andenes de las diferentes líneas, y ocho escaleras mecánicas. El vestíbulo tiene una superficie de 821 metros cuadrados que, frente a los 114 que tenía antes de las obras, facilitará el tránsito a las casi 55.000 personas que diariamente utilizan la estación.
Por otra parte, la estación alberga un pequeño museo, situado en la segunda planta, que incluye varios vestigios de la antigua Plazuela de los Caños del Peral, hoy Plaza de Isabel II, concretamente la fuente de los Caños del Peral, el Acueducto de Amaniel, que surtía de agua al cercano Palacio Real, y otros elementos hidráulicos, como la Alcantarilla del Arenal.
Estos restos, que fueron encontrados durante las obras, y en cuya recuperación han colaborado Metro y la Dirección General de Patrimonio Histórico del gobierno regional, pueden observarse a través de enormes mamparas y están explicados en una sala dotada de equipos audiovisuales.
Por último, resaltar que también se ha remodelado la Plaza de Isabel II, reduciendo el espacio para el tráfico rodado y convirtiendo en peatonales 1.509 metros cuadrados que dan continuidad a la calle Arenal, y la conectan con la Plaza de Oriente y la calle Arrieta.
Vía: Vía Libre
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