Teniendo en cuenta los tiempos que corren, donde cualquier cosa está accesible a un par de clicks, la Enciclopedia Británica seguía vendiendo ediciones impresas; y digo seguían, porque han anunciado que dejarán de editarla en papel.
Esta decisión llega tras los resultados de la edición de 2010, de la que han vendido 8.000 ejemplares (otros 4.000 se mantienen en los almacenes a la espera de algún comprador), los cual no tiene nada que ver con los 120.000 que colocaron de la edición de 1990.
A partir de ahora, los responsables de esta mítica y gran enciclopedia, que comenzó su andadura hace 244 años (casi nada), centrarán sus esfuerzos en la versión web, las suscripciones a este servicio suponen un 15% de los ingresos, y en los libros de texto, que suponen el 85% restante.
Vía: Microsiervos
No hay comentarios:
Publicar un comentario