Pues bien, parece que no serán los únicos en hacer uso de esta tecnología, puesto que Coca-Cola ha llegado a un acuerdo con PingPing para realizar una serie de pruebas en Bélgica y Luxemburgo, las cuales comenzarán el próximo mes de diciembre.
Gracias al uso de NFC, cuando queramos realizar una compra, tan sólo tendremos que pasar por el lector de la maquina una pegatina, que podemos llevar pegada en el móvil, con los que la máquina expendedora sabrá el crédito que tenemos disponible. Tras ello, seleccionamos el refresco que queremos, descontándose el precio correspondiente y mostrándonos lo que nos resta de dinero, que podemos ampliar mediante micro-pagos.
Si este sistema de pagos se consigue implementar, para una correcta recepción entre ambos chips tiene que haber una distancia inferior a los 20 centímetros, nos podremos olvidar de llevar dinero suelto en nuestros bolsillos.
Vía: Alt1040
No hay comentarios:
Publicar un comentario